INVESTIGANDO LA ENERGÍA DEL AHORA

Canalizado por Sorem

2 de Octubre de 2005

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-¿Cómo podemos explicar, a quien nos pregunte, con sus diferentes estados de asimilación, de una manera generalizada, estos conceptos espirituales que vamos comprendiendo y practicando cada uno/a en su medida?

Para explicar cualquier tema, y para ser consecuente con la explicación, hay que dominar en cierto grado dicho tema, de una manera demostrable tanto teórica como practica, dentro de las posibilidades permitidas por las características de los diferentes temas.

Como el tema sugerido es espiritual, en su explicación es más difícil que vaya acompañada la teoría con la práctica, ya que la práctica tiene que ser realizada cada uno/a por sí mismo/a, pero para explicarlo, se puede apoyar con otro tema paralelo, y podría ser de la manera siguiente:

Para investigar las energías de la espiritualidad en su explicación, podemos compararla con el estudio de la materia de las matemáticas: Para estudiar matemáticas hay que empezar con los cursos de enseñanza primaria, con el tema espiritual, igualmente tiene una enseñanza primaria, con todos los cursos correspondientes para completar una enseñanza inicialmente básica.

Hay personas que no han estudiado nada de estas materias, y se podría decir; que son analfabetas de estos temas, estas personas estarán muy limitadas para comprender ciertos problemas que le surjan en su vida, y tendrán que prescindir de las soluciones y aguantar las situaciones como buenamente puedan, o pedir ayuda y depender de la orientación de otras personas.

Otras personas estudiaron la enseñanza primaria básica, y lo consideran suficiente para solucionar los problemas que puedan surgir en su vida, pero, cuando la vida las pone a prueba con un problema o situación que sobrepasa sus conocimientos... si la solución requiere una aplicación de conocimientos matemáticos, se pondrán nerviosos y no podrán solucionarlos, comprendiendo su carencia. Pero si el asunto es de carácter espiritual, y su conocimiento primario no comprende ni ve solución alguna, entonces, suele ser común la exclamación: ¡No es justo, Dios!, ¿Por qué?, ¿Por qué a mí?...

Otras personas están interesadas en seguir estudiando, comprendiendo y practicando todos los grados que le permitan su capacidad, estas personas podrán comprender y solucionar la mayoría de sus problemas, confían en sí mismas por el conocimiento teórico-practico que tienen, consiguiendo con el esfuerzo y dedicación permanente para aprender.

Espiritualmente, hay personas que tienen estudios primarios de estos temas, quieren, pero no pueden avanzar, porque los prejuicios religiosos los limitan, sin que ellas sean conscientes de esta limitación, y cuando sufren un problema que no ven la solución, ni comprenden porqué lo tienen, no lo relacionan con su falta de conocimiento, ni que dicho problema le esté indicando y pidiendo un esfuerzo y atenta dedicación, para comprender el sentido que tiene y le trae con su solución como enseñanza, sólo se limitan a sufrir las consecuencias con paciencia, diciendo: ¡No podemos hacer nada, sea lo que Dios quiera!...

Todos los problemas o energías que nos proporcionan un desequilibrio físico o psicológico, como puede ser una enfermedad grave, nos está indicando el trabajo espiritual que tenemos que descubrir y realizar, esta energía desequilibrante no es ni buena ni mala, sólo se pone ante nosotros con un propósito, el cual nosotros tenemos que descubrir y equilibrar con nuestra propia energía, creada con la acción que nos indica dicho propósito.

Hay personas muy espirituales y con una gran fe en las enseñanzas de Jesucristo, guiados por la iglesia católica, que se encuentran en estas graves circunstancias, rezan y rezan... y pasivamente esperan diciendo: ¡No podemos hacer nada, sólo rezar, sea lo que Dios quiera!... efectivamente, no pueden hacer más de lo que su iglesia les enseña y saben.

Si analizamos la situación con las enseñanzas de Jesús, sin tener en cuenta lo que diga la iglesia, entre otras opciones, podemos ver: Hace 2000 años, el maestro Jesús nos dijo: "Donde haya dos o más reunidos en mi nombre, Allí estoy Yo en medio de ellos"... y en estos 2000 años, todas las personas que hemos creído en esta declaración de nuestro maestro Jesús... nos hemos reunido en su nombre... le hemos expuesto preguntas... y hemos recibidos sus extraordinarias enseñanzas...

La persona que sea espiritual y se encuentre en una situación de enfermedad grave, no debe creer, que no puede hacer nada como dicen los católicos; se pueden reunir, la persona enferma con la familia, en nombre de Jesús... ponerse en una situación de sentimiento profundo, para sentir su presencia... preguntar cuál es el sentido de la enfermedad... y sentir o recibir en sus mentes las respuestas, para comprender lo que pueden hacer, cada uno/a del grupo, para conseguir el equilibrio con la energía de sus acciones, y así, pueda desaparecer la enfermedad si ello es lo conveniente y la decisión del grupo familiar.

Los que han aprendido bien las enseñanzas de Jesús, en su estado profundo y sin prejuicios religiosos, entenderán bien el conocimiento progresivo que el maestro Jesús y todos los Guías de la humanidad, han estado enseñando a todos los seres humanos que tienen la mente abierta para escuchar, comprender y practicar en lo posible lo comprendido, con todo esto, actualmente, vemos el inicio de ser posible la declaración que también nos dio Jesús hace 2000 años, refiriéndose a los milagros: "Cosas iguales y mayores que yo haréis"...

Jesús, cuando vino hace 2000 años, les dijo a los religiosos que no venía a derogar ninguna ley de los Profetas, sino a prolongar un proceso evolutivo para cada capacidad de progreso espiritual, y desde entonces hasta nuestros días, Jesús y los Guías de la humanidad, han seguido dando cursos intensivos a todos los seres humanos que han querido estudiar y progresar en su evolución espiritual, así, podemos llegar a comprender la Nueva Energía del ahora, pero los que están parados con las enseñanzas que dieron para la humanidad de hace 2000 años, les será más difícil comprender muchos de los problemas que la vida le expone. " ‡ ".