TRAER UN TROCITO DEL OTRO LADO

Canalizado por Sorem

7 de Enero de 2005

sorem@hotmail.es

http://sorem-canalizaciones.blogspot.com/

- El haber decidido que en las comunicaciones no intervengan los Guías para esforzarme más en el contacto con mi Yo superior, no quiere decir que alguna vez me comunique con vosotros, si lo veis conveniente.

Lo conveniente siempre es lo necesario para vuestra evolución creciente, y para ello, lo más aconsejable es la menor intervención posible para que os esforcéis mucho más en conseguir lo mismo, pero con vuestros propios méritos, demostrándote a ti mismo que se pueden conseguir los mismos resultados por sí solo.

Esta experiencia de comunicación con tu parte divina es una prueba de lo que podéis conseguir con la decisión y el convencimiento de realizar todo lo que os propongáis con la fe absoluta de conseguirlo.

Estos escritos no tienen un carácter de revelar ninguna situación importante, sólo es adecuado para una demostración práctica a nivel particular, y puede servir de orientación a los que quieran intentar la misma experiencia.

En el otro lado estamos siempre esperando a todo el que decida esa comunicación interna con vosotros mismos, porque tenéis que saber, que en el otro lado, no es un lugar especifico ni físico en un sitio determinado, pero sí os decimos; que para comunicaros con el otro lado, el lugar más indicado es en vuestro interior, en vuestro corazón.

El corazón tiene el sentido y la expresión del Amor, por ello, con cerrar los ojos y sentir el Amor noble de tu propio corazón, instantáneamente entras en comunicación con el otro lado, con tu otro Yo, con tus Guías, con la corriente de Amor a tu servicio.

Os puede resultar extraño cuando vais a un lugar dispuestos y decididos para servir en lo que sea necesario, y lo único que encontráis en ese lugar es todo lo contrario, que todos los seres y las energías están esperándote y dispuestas para servirte a ti.

Cuando traemos un trocito del otro lado y nos identificamos con su significado, es una explosión de Amor que se manifiesta en todas las direcciones, sin distinguir ni escoger a nada ni a nadie, impregnando con Amor puro a todo y a todos por igual.

Tenemos que prepararnos muy bien en este lado físico para poder recibir esos trocitos del otro lado, y poder darle su plena manifestación con pleno jubilo de agradecimiento compartido entre todos, agrandando su contenido con un sentido de unidad para conseguir con ello el equilibrio individual y colectivo.

Cerramos los ojos y nos vamos al otro lado, en ese lado podemos realizar todas las maravillas de Amor social compartido, como profundamente deseamos, viendo felicidad en todos por igual. Abrimos los ojos, y nos damos cuenta que el otro lado está dentro de nosotros, y el poder para construir las maravillas con Amor de hermanos socialmente, también está con todo su poder dentro de nosotros, entonces, lo mismo que lo hemos realizado en el otro lado, lo podríamos realizar físicamente en este lado... será cuestión de practicar con Pura Intención...

Bueno, no parece tan fácil, pero estamos aprendiendo, primero creamos la realidad de igualdad social con Amor y felicidad para todos, en nuestros pensamientos, después le damos fuerza unificada a esos pensamientos, para que vayan cogiendo consistencia física, y poco a poco... cuando este mismo pensamiento lo potencie el mayor número de humanos... se hace realidad... ¡hagamos la prueba, para haber si es cierto!

Le llamamos realidad a lo que vemos, tocamos y realizamos físicamente, pero yo estoy viviendo con estas comunicaciones, una realidad que no se toca físicamente, pero se siente como energía de calor físico, y te inunda en una gran paz, felicidad y bienestar.

Estas comunicaciones de escritura ágil con mi mente, están en el estado que yo deseo: puede que en mi mente empiece hablando mi Yo superior, y también intervenga mi yo inferior, o los Guías, o la energía unificada de todos unidos en sí mismo, o mi creatividad, -que no se lo que es-... ¡bueno, vale!, habla quien quiere hacerlo, manifestando su Amor puro, porque todos somos parte de todos, y, ¡que más da que hable uno u otro!, somos ¡NOSOTROS!, la familia de todo el Universo... y todo esto es, lo que nuestra limitada capacidad de ser humano puede comprender...