Canalizado por Sorem
4 de Enero de 2005.
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En esta investigación de escritura, considero con relativa claridad que se realiza mi deseo; comunicarse mi yo inferior de este lado, con mi otra parte o Yo superior del otro lado.
Esta manifestación escrita tiene para mi mucho valor, pero para otras personas puede que no tenga ninguno, por ello, cada uno tiene que experimentarlo por sí mismo, para que sienta y valore la energía que acompaña a esta comunicación por escritura ágil e interesante.
En esta época estamos viviendo el proceso de intención más importante de todos los tiempos: "Traer el Cielo a la Tierra", y para ello estamos aprendiendo a unificar el yo inferior con el Yo superior, para dejar cada vez más tiempo al Yo superior manifestarse en todos los asuntos de la vida cotidiana, de cada ser humano consciente de esta realidad actual que estamos viviendo.
La parte de nuestro ser que tenemos en el otro lado, conoce perfectamente nuestro recorrido evolutivo, de todas las enseñanzas de las vidas anteriores y la finalidad de esta vida, ese conocimiento se irá incorporando a este lado, siempre que seamos receptivos para llevar a la practica vivida lo aprendido y establecido anteriormente, para el aprendizaje individual y el beneficio colectivo en nuestra área de influencia, y dentro de lo posible, a toda la humanidad.
El Yo superior irá distribuyendo su influencia de Amor y Sabiduría según la necesidad de las decisiones adquiridas, para el esfuerzo voluntario de superación y sacrificio, en el servicio a las necesidades de los demás, dentro del área de influencia social y espiritual.
El área de influencia está determinada por las decisiones de búsqueda y ofrecimiento en los sitios de necesidades diversas. Estos lugares de necesidades humanas están muy activos, en servicios a los demás para las actividades de ayuda a los necesitados.
Este servicio de ayuda que el Yo superior le indica cada vez a más seres humanos despiertos, es un servicio de Amor inteligente llevado a la practica de cada ser que activa su corazón, para ejercer la energía que pueda curar las necesidades de todos los que están enfermos de cuerpo y alma.
Los servicios que se pueden hacer para ayudar a los necesitados de diversas situaciones, están esperando la oportunidad de los decididos, y que estos puedan hacer valer todo lo que sienten para ayudar y servir con verdadero Amor a los demás.
El Yo superior está indicando siempre todo lo que podemos recordar del otro lado para activarlo con vida propia en este lado, donde podemos efectuarlo como nuestra realidad del ahora, en esta vida física para el progreso evolutivo individual, y al bien común en todos los servicios de ayuda a los demás.
Todo lo que el Yo superior aporta a este lado es lo que puede ser realizable y totalmente posible, para la superación y realización de un pasito más hacia el bien común del área de influencia más cercano, y la unión con otras áreas afines, y así, ampliar la influencia positiva generada por todos los comprometidos.
Esta realidad de obtener la energía del otro lado para manifestarla en el lado físico del proyecto Tierra, es cada vez más generalizada y obtenida en una progresión muy significativa, para conseguir con eficacia en poco tiempo, el significado de todo el sentido del proyecto: "Traer el Cielo a la Tierra".
Con este estado de evolución en el que nos encontramos la humanidad del proyecto Tierra, ya nos hemos ganado unos privilegios que nos cuesta creerlo, pues aunque son el fruto de mucho esfuerzo de siembra anterior, nos cuesta mucho aceptarlo, y como lo vemos inalcanzable y casi imposible de creer, pues ni tan siquiera lo intentamos.
Si tuviéramos verdadera conciencia de todos los seres de Luz y Amor que están ayudándonos constantemente para nuestro bien, podríamos tener más confianza en ellos y sentir su presencia a nuestro lado, siempre dispuestos para ayudarnos en lo que necesitemos y le pidamos, pues bien, pongamos de nuestra parte lo que sea necesario, intentándolo con el convencimiento de realizar lo que sencillamente puede ser natural, teniendo también confianza en nosotros mismos.
Para conseguir esa confianza en nosotros mismos, sólo tenemos que ponernos a practicar con el convencimiento de conseguir todo lo que puede ser cierto, si nosotros queremos, una realidad natural, ¿no sería algo natural, hablar con nosotros mismos? ¡Probar con convencimiento, sin miedo al fracaso!, al principio todo será algo confuso, pero para aprender hay que practicar y sentir lo que se hace.
No me cansaré de deciros que cada uno tiene que vivir por sí mismo todas las situaciones que nos ayuden a evolucionar, y actualmente tenemos estas energías dispuestas a nuestra disposición para todo el que quiera disponer de esta oportunidad extraordinaria.
Esta intención de acercamiento interno, para dejar que se exprese nuestra parte divina de una manera sencilla, y con toda naturalidad nos pongamos a escribir todo lo que nos diga nuestro Yo superior, como algo natural ya conseguido en nuestro grado evolutivo actual, formando en esta acción, una realidad cada vez más activa y sentida.
Es posible que esta realidad la estemos viviendo en cierta medida de una manera inconsciente, pero sería consistentemente acelerada si le diéramos el impulso consciente y necesario para que sea una realidad mejor comprendida, y después, participativa conscientemente en todas las situaciones significativas de nuestra vida.
Nuestra vida puede estar dirigida y arrastrada por la corriente superficial, siempre potente de una energía social casi desequilibrada, y por el contrario, podemos ser dueños absolutos de las decisiones de nuestra vida, con ese contacto interno con nuestra parte divina o Yo superior, para conseguir la salud y el equilibrio de nuestro cuerpo físico, y reine la alegría con todo el esplendor de la vida, al radiar esta satisfacción de Amor a todos y a todo lo que nos rodea.
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