LEY DE AFINIDAD

06/03/2004

El Planeta Tierra se encuentra en 3ª dimensión en transito a 4ª, prácticamente ya parece casi haberse cumplido el ciclo. Nuestra madre naturaleza está esperando ese cambio que necesitan todos los seres que quieran superarse para poder pasar el mayor número posible de la humanidad, cogiendo ese grado de vibración necesario para poder vivir en la nueva situación de la Tierra.

De una canción conocida podemos olvidar la letra, pero el estribillo se nos queda en la memoria para toda la vida, por su repetición. Amiga mía, permíteme que yo emplee el mismo sentido con ciertos conceptos, por considerarlos muy importantes, uno de ellos es: Tomar en consideración durante toda la vida una Evolución Consciente.

Cuando la persona conecta con su Yo interior, viendo con toda claridad el sentido real de porqué ha venido a la vida física, toma conciencia de su estado evolutivo, y para conseguir elevarse a estados superiores, se hace más responsable de sus pensamientos y acciones, ya no tiene tiempo de ocio, su tiempo lo considera muy importante, el tiempo que pasa no vuelve, y está atento para aprovechar todas las oportunidades que la vida le ofrece diariamente.

Anteponiendo por encima de todo el Amor, los deseos egoístas quedan relegados.

Nadie te va a elegir, exigir ni forzar para hacer todo esto; sólo tu Conciencia te puede considerar este cambio, y también cuando el ser está preparado para conseguir el equilibrio interno dentro de este mundo exterior desequilibrado; manifestándose así la Ley de Afinidad que tú misma decides conectar con los mundos elevados para recibir la sabiduría, la fuerza, y el Amor que necesitas en tu nueva situación.

En todos los lugares actúa la Ley de afinidad, juntándose las personas buenas para hacer cosas buenas, y por otro lado las personas menos buenas para hacer cosa menos buenas. En el Universo también se unen todos los mundos elevados para ayudar a los mundos en peligro de autodestrucción, con una organización unificada llamada Confederación de Mundos.

Cada mundo también tiene su gobierno interno. En el Planeta Tierra tenemos la Hermandad Blanca que ejerce su influencia del bien sobre toda la humanidad con las manifestaciones positivas. Y en el sentido del mal o negativo también actúa la Hermandad Negra con sus legiones de adeptos, afines, conscientes e inconscientemente.

Estas dos energías ejercen su fuerza sobre la Humanidad de una manera secreta. Vivimos en un mundo de libre albedrío, por ello, el bien y el mal se mezcla en todas las circunstancias de nuestras vidas con total naturalidad, teniendo la Hermandad Negra una gran influencia sobre todas las personas con todos los medios de manifestación pública, creando separatismo y un terrible ambiente de confusión.

La Confederación de Mundos y la Hermandad Blanca del Planeta unifican sus fuerzas y misiones de ayuda para la evolución equilibrada de la Humanidad.

Cuando la falta de virtudes y las injusticias de la Humanidad caen muy bajo, con peligro de desviarse para siempre por caminos destructivos, viene un Hermano Mayor de los mundos elevados, con una misión meticulosamente programada por la Confederación de Mundos y la Hermandad Blanca, para dar ejemplo de vida con su enseñanza, y corrigiendo con su influencia el sentido de la Humanidad. Estos Hermanos Mayores han venido, vienen y vendrán siempre que sea necesario.

En la época actual la mayoría de los seres humanos sentimos una gran necesidad interna de un cambio de la sociedad mundial. Las leyes injustas que consienten las grandes desigualdades: por un lado mueren de hambre miles de personas, y por otro lado se derrocha innecesariamente ese dinero que podría evitar esas muertes con sus indescriptibles sufrimientos.

Este sentimiento profundo que está manifestando la mayoría de la humanidad, con su grito interno en el corazón humano, no sólo tiene que ser sentido, sino vivido con acciones a nivel mundial, y sólo así podremos tener una reacción de lo elevado.

En todos los tiempos que las circunstancias eran semejantes a la que vivimos en esta época, por la fuerza del sentimiento interno unido de todas las personas de buena voluntad, provocan una energía que recibe directamente los mundos elevados, reaccionando con la venida de un ser muy evolucionado para ayudar a la humanidad.